ojalá pase algo que te borre de pronto,
una luz cegadora, un disparo de nieve,
ojalá por lo menos que te lleve la muerte...
para no verte tanto, para no verte siempre
en todos los segundos, en todas las visiones
Cuando escuchaba esta canción de Silvio era muy chica (era la época también en que cantar Silvio junto a la guitarra mejor o peor tocada, era lo que la llevaba). Ninguna dimensión acerca de su contenido, no me imaginaba ni lo que cantaba.
ojalá que las hojas no te toquen el cuerpo cuando caigan
para que no las puedas convertir en cristal
ojalá que la lluvia deje de ser milagro que baja por tu cuerpo
ojalá que la luna pueda salir sin ti
Olvidar es una de las cosas más difíciles por las que he pasado y supongo que el resto también. Es como un laberinto lleno de falsos pasillos que a veces tomas y que no conducen a la salida. A veces con ganas de agarrar a patadas hasta una simple hoja inofensiva botada y otras, sin ganas de andar.
Una vez que la luna salió solita y que uno puede cantar una canción como ésta sin que se quiebre la voz ni se te pongan los ojos vidriosos, podríamos considerarnos sanados.
ojalá se te acabe la mirada constante,
la palabra precisa, la sonrisa perfecta...
Etiquetas: nota mental
Y claro...olvidar a veces cuesta mucho, otras de plano es imposible, pero algo de bueno debe tener eso, porque nos hace recordar ciertas lecciones.
Sería bacán poder sacar ciertos recuerdos de la mente y limitarlos a estar en un pensadero como el de Dumbledore (sí toy rayá, por cierto, terminé raja shorando con el libro)
Nos vemos, abrazos!