Mis ellos
19 junio, 2006
Ellos en mi vida son pocos pero buenos.
Recuerdo como si fuera ayer esas noches cortas haciendo esas muestras de género con mi papá para la clase de técnico manual, porque mi mamá a veces trabajaba en la noche y no daba abasto con la casa, el trabajo y las tareas. Santa paciencia me tenía porque yo siempre he sido un tanto complicada y los generitos sacaron lágrimas mias. No por él, sino por la profesora que me lo rechazó porque no era lo que ella quería. Aquí no recuerdo más detalles, sólo recuerdo que llegué llorando a la casa porque la señora me habia puesto como un 5 (para mí más que una afrenta) y mi papá fue al colegio a alegar. Obvio, si él se había quedado la noche anterior hasta tarde ayudando a recortar telas y buscando información en las enciclopedias y fotocopias que tenía en la casa.
Me pongo en su lugar ahora y realmente no entiendo de adonde sacaba ganas para ayudarnos a veces con las tareas y el estudio. Bueno, no tenía mucha paciencia tampoco, se le acababa rápido. Como las veces que estudiábamos geometría y no sé por qué yo no podía poner la escuadra en posición correcta para marcar el ángulo recto, y un escuadrazo en la cabeza me gané.
Me imagino en su lugar, estudiando en la U, con una cabra chica mañosa como yo. Después con dos niñitas en el colegio, medias peleadoras, gritonas, una media matona, la otra llorona.
Hace como ocho años todo cambió. No creo que para mal. El quiebre y el alejamiento trajeron una renovación total de nuestra relación. Aunque es muy duro que te digan que tienes que entender porque eres grande (yo entendía igual sólo que no predecía que los siguientes 2 años serían muy difíciles). No lo vi en ese tiempo ni hablé con él ni nada. Un día volvió a la casa y me saludó como si me hubiera visto ayer. Comprendí que no había nada que perdonar, nada que recriminar, sólo seguir adelante.
Ayer, pensé que iba a ser como antes, como el escuadrazo aquél: fuimos con miss Lee a ver los partidos de fútbol a la casa de Orlando y me robaron el espejo del auto. Y nada, me dijo que tenían un dato con mi hermano y que fuera no más a comprarlo. Nada de insultos, nada de retos, nada de esas cosas desagradables que me hubiera dicho antes, porque la culpa fue mía.

Mi hermano, el Criko. Otro tipo simpático, es de esas personas que por más embarradas que se manden, no te puedes enojar con ellos. Tenemos hartos años de diferencia y no se sienten. Cuando chico era muy malo, de los que te tiraba la flauta por la cabeza cuando no le salia la canción o te andaba tirando bombas de agua encima. Es una buena compañía. Espero que su deporte tuerca no le cobre ninguna. El año pasado tuvo un terrible accidente y no le pasó nada, pero el dolor de guata y la angustia que tuve cuando vi la foto del auto fue casi incontenible.

Ellos son mis ellos, a veces se han alejado pero vuelven. Ellos han estado ahí para hacerme otro tipo de compañía, para hablar de otras cosas, para reirme un rato, para recordar los Simpsons, para enseñarme algo de mecánica, para leer el diario, para hablar del dólar, para ver tele o simplemente para molestar a mi mamá cuando se pone latera. Igual cuando no están cerca, los echo de menos.
divagaciones de eat-desserts a las 11:40 p. m. |

20 Comments:


  • At 20/6/06 12:06 a. m., Blogger Då®th Pëgå$ø Nåzgü£ † ™

    por lñegar tarde te paso !!!

    si llegas a la hora lo estacionas en las weas pa visitas y no te roban nada

    bueno pero ke lata ke en este pais haya ke andar con cuidado

    nos leemos  
  • At 20/6/06 9:10 a. m., Blogger Mis Nuevos Aires

    Huyy que lindo vale.. la familia siempre serà lo mas importante... aunque existan días que nuestros dolores de cabeza sean por ellos..

    Que lata lo del espejo..

    Cariños Vale!!!!!!!!!!  
  • At 20/6/06 9:30 a. m., Blogger danieLa®

    Es como lo que digo yo: somos pocos pero buenos. En realidad por parte de mi padre tengo como nueve tíos cada uno con un promedio de tres hijos más o menos, el tema es que nos vemos tarde mal y nunca pero no los echo de menos.

    Sí me gusta estar con mis hermanos, cuñados, mamá, sobrinos y colados hablando de la vida, de la inmortalidad del cangrejo y de lo mal que anda el país a veces. Como digo: eso no tiene precio, para todo lo demás existe la master card.

    Un abrazote y a comprar el espejo no más pues.  
  • At 20/6/06 3:51 p. m., Blogger Siempre Yop, Bárbara para los amigos

    por eso son lo unico tuyo, a veces te gustaria patearlos, otras tantas abrazarlos, pero siempre recuerda que son lo unico verdaderamente tuyo, el resto va y viene en cualquier minuto, bonita historia con olores de recuerdos de infancia,

    salu2  
  • At 20/6/06 5:28 p. m., Blogger Marcel Pommiez

    No hay como la familia...


    Un abrazo  
  • At 20/6/06 9:36 p. m., Anonymous Anónimo

    Mi vieja me ayudaba con Técnico Manual...aunque la pega mayor se la llevaba una prima que era seca con las manos. ¿Lo demás? Trataba de molestarlos lo menos posible (a lo más, comprar los materiales) porque me encanta hacer carpetas.

    Estoy en la disyuntiva...porque una parte de mí sólo quiere alejarse de una familia que le ha dado muchas amarguras, principalmente la falta de apoyo. Pero por otro lado sé que, de alguna forma, necesitarán de mí y no puedo decirles que no (que la sangre tira, es cierto).  
  • At 21/6/06 1:48 a. m., Blogger Unknown

    ¡Ayyyyyyyy¡ La familia. Es cierto, a veces la convivencia se pone difícil, roces, peleas, malos entendidos y un laaaaaaaargo etcétera pero como dicen: “No puedes vivir con ellos y tampoco sin ellos”. Son “algo” necesario.

    Además, debo mencionar que cada familia tiene sus “etapas” y en si misma va evolucionando, por ejemplo la familia del año anterior no siempre es igual (en comportamiento, hechos y anécdotas ) a la del año pasado.

    Ahora que vivo al anverso del mundo, cuanto los echo de menos, cuanta falta me hacen sus ritos y su cotidianeidad, apoyo y espontaneidad. Así mismo será pronto… algún día cuando también me toque tener mi “propia” familia.

    Si no, escuchen la canción de Pimpinela: “La familia”, mi mamá cada vez que la escucha se pone a llorar.

    ¡Así es la vida!

    Saludos y cariños.  
  • At 21/6/06 8:46 a. m., Blogger Nacho

    La familia es de la pocas, poquitas cosas verdaderamente importantes que hay en la vida.

    El que te robó el espejo; que lo disfrute. Eso no entra en el concepto de cosas importantes. Las que se compran o se venden no lo son. Ser un miserable y un ladrón sí lo es.

    Besitos, Vale.  
  • At 21/6/06 4:34 p. m., Blogger paulina y marco

    precisamente: la familia es de las pocas cosas importantes de la vida. Muy buen blog  
  • At 21/6/06 10:29 p. m., Blogger Icy

    Y qué es la familia sino el círculo que te enseña a vivir en sociedad??? A bancarte a los que no son tan afines contigo pero igual los quieres?

    Yeap! una lata lo del espejo, hay que cuidarse, Santiago no es lo que era... en fin!!!

    Buen post, lleno de nostalgias de todo tipo... y sip! lo más difícil de las separaciones es tener que contarle a los hijos, no lo sabré yo!!!! Valorrrrrrrr!!!

    Un beso, nos leemos!!!

    Icy  
  • At 22/6/06 10:17 p. m., Blogger Anita

    Vale, así son las familias.
    En el fondo no se les puede dejar de querer.
    Son únicos.
    Un abrazo grande!!

    Ah! toma un seguro contra robos, puede ayudar para la próxima....  
  • At 23/6/06 11:33 a. m., Blogger Roberto Iglesias

    fome lo del espejo...
    es cierto lo que dice claudia, la familia lo mas importante no importando que ello traiga mas de algun dolorcillo de cabezota

    saludos cordiales  
  • At 23/6/06 5:21 p. m., Blogger Shlomit Baytelman

    !Que bueno es compartir atardeceres y amanecidas!

    Un gran abrazo.

    Shlomit.  
  • At 23/6/06 5:21 p. m., Blogger Shlomit Baytelman

    Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.  
  • At 23/6/06 5:22 p. m., Blogger Shlomit Baytelman

    Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.  
  • At 23/6/06 5:24 p. m., Blogger mixtu

    non hay que haver muchos ellos, tienen es que sé buenos
    beijos  
  • At 24/6/06 1:23 a. m., Blogger Loredana Braghetto

    llegué a tu blog a través de mi amiga Paloma.
    Lindo relato.  
  • At 24/6/06 8:24 p. m., Blogger * A m y L u n a *

    Tu hermano es igual a ti!!

    Bonito post... salvo lo del espejo! q mala pata...

    Mi pololo los saca cada vez que estaciona, luego los vuelve a poner... no es tan difícil después de todo.

    Un abrazo!!

    Carola  
  • At 24/6/06 9:12 p. m., Blogger Paitoca

    es uno llega a una edad en que es algo "indecente" que le papá te siga retando, no?... mi papá ya no lo hace conmigo, pero puchas que le costó dejarme que solita me hiciera responsable de mis condoros!...
    Saludos!!!  
  • At 25/6/06 6:26 a. m., Blogger Crusoe

    Bonita familia!
    :)  
y