Esa es la pregunta. No lo sé, yo creo que la felicidad es un estado bastante esquivo y quizás breve. Me pregunto si la gente de verdad es feliz. El otro día mi hermano me decía que no tenía motivos para quejarme porque tengo muchas cosas que nadie ni siquiera sueña con la posibilidad de tener. Pero es que siempre soy inconformista y quiero estar en otra situación o tener otras cosas. El deseo me motiva a seguir, el problema es que a veces a lo mejor exagero la nota y como que me "consumo". Puede ser que la piedra en el zapato me molesta más que de costumbre.
Hace unas semanas recibí una llamada de alguien para disculparse por alborotar mi vida. La verdad es que sí estuvo alborotada, pero en buena. Me permitió darme cuenta de que la vida no es para nada estática y que los escenarios son muy dinámicos. Es como si un día vivieras aquí y al otro ya no y quizás muy lejos. Me gustó la frase de que la oportunidad la pintan de calva. Tiene toda la razón, el problema es que a veces me ciego y no veo nada. Pero lo bueno de todo el asunto es que no tengo que preguntarle a nadie su opinión (cosa que hasta hace algunos años yo lo consideraba impensable), me enrollo sola pero siempre sucede algo que me alumbra.
En realidad, pensándolo bien, no tengo pena. Pero Rafa, gracias por el ánimo (prometo sonreir más en estos días).